Este paraíso gourmet de origen suizo ofrece un surtido portafolio de productos delikatessen nacionales e importados, servicio de catering y atención personalizada. La historia de Arflina comenzó en 1970, cuando dos amas de casa decidieron abrir, en el barrio Santa Ana, una tienda en la que ofrecían todo lo concerniente a salsamentaria y quesos. La marca se posicionó de tal forma, que su lista de víveres premium creció y se abrieron nuevos puntos para satisfacer a sus clientes y proveedores.
Hoy en día manejan miles de referencias de la más variada gama de alimentos en quesos y charcutería, encurtidos, salsas, enlatados, condimentos y especias, chocolates, dulces, galletas, pastelería y té, entre otros. Además, ha desarrollado sus propias marcas en productos como mermeladas y salami.
En cuanto a vinos y licores, gozan de una espectacular cava de vinos y una fina selección de champagne, ron, vodka, whisky, tequila, ginebra, cognac y brandy de las mejores marcas.
También cuentan con la categoría de tablas buffet, ideales para eventos, las cuales incluyen suculentas carnes y quesos semi maduros o productos exclusivos de mar y río. Los pedidos se pueden hacer a en sus sucursales en Bogotá o vía online.